La capacidad de recordar

«Las personas tienen objetivos muy concretos en Internet. Eso significa que están muy poco abiertas a contenidos no relacionados directamente con la tarea que tienen entre manos. Acabo de leer un estudio muy interesante titulado Memory for advertising and information content: Comparing the printed page to the computer screen. Una de sus conclusiones fundamentales es que “lo impreso es mucho más fácil de recordar que la pantalla... El asunto central de este estudio es que a los individuos les es más fácil recordar elementos impresos que vistos en pantalla”......

.....La Red está cambiando la esencia de la memoria y el recuerdo. La Red se está convirtiendo en una extensión de nuestra memoria. Ya no necesitamos recordar tanto si tenemos motores de búsqueda que pueden “recordar” por nosotros. Eso cambia la esencia de la comunicación. En lugar de machacar un mensaje, esperando que se fije en nuestra memoria, los comunicadores necesitamos estar preparados para cuando las personas hagan una búsqueda. La comunicación en Internet trata más sobre responder a las necesidades de información de las personas que sobre intentar influir y moldear esas necesidades.»

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«La memoria visual a corto plazo es bastante limitada: a pesar de los numerosos objetos que rodean al hombre, su capacidad le permite recordar sólo unos pocos. Por eso, cuantos menos objetos irrelevantes se tengan en cuenta, mayor será la capacidad de recordar las cosas realmente importantes. A esa conclusión llegó un grupo de expertos de la Universidad de Oregon, Estados Unidos.

La investigación se publica en la prestigiosa revista "Nature" porque es la primera vez que se establece cuál es el mecanismo de selección de la memoria. Y al contrario de lo que se creía, tener más memoria no está relacionado con la capacidad de recordar la mayor cantidad de cosas posibles sino con la capacidad de seleccionar qué es lo importante y desechar los datos o la información que no vale la pena.»

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Después de estas dos lecturas ya sabemos algo más sobre la memoria humana, podemos sacar en pocas palabras la conclusión de que no se es más inteligente por recordar más cosas, de que lo importante es ser capaz de recordar los detalles importantes y de que usamos internet para no tener que recordar tantas cosas precisamente porque internet nos ofrece herramientas que las recuerdan por nosotros.

Y a este punto es a donde quiero ir a parar; por ejemplo, los navegadores nos ofrecen la posibilidad de guardar las páginas web que visitamos en la sección de marcadores o favoritos (depende del navegador) para no tener que recordar todas esas direcciones que visitamos, algunas con una URI bastante difícil de recordar. Además tenemos servicios online como del.icio.us que nos permiten guardar esas direcciones para acceder a ellas desde otros equipos, o por si por la razón que sea perdemos los favoritos/marcadores de nuestro navegador tener ahí una especie de copia de seguridad.

Pero, ¿hasta donde llega lo absurdo de permitir que un servicio online recuerde algo por nosotros? Esta mañana dando un vistazo a los enlaces más populares y a los más recientes de del.icio.us observé para mi asombro que casi 8.000 usuarios tienen guardado en sus marcadores online el enlace del propio del.icio.us, supongo que toda esta gente no tendrá problemas de memoria ¿te imaginas guardando la contraseña de una caja fuerte dentro de la propia caja fuerte y que luego se te olvide?

Es solo una curiosidad más, absurda y curiosa.

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